Ensimismarse

Ensimismarse: recogerse uno mismo en su propia intimidad. 

En el caso que ese recogimiento no sea para regodearse en bucles mentales negativos, yo le llamo:

EN-SI-MIMARSE

Porque uno puede pensar pero sin que los pensamientos le controlen, sino utilizándolos para re-educarse a uno mismo, plantearse objetivos o mimarse con afirmaciones que nos llevan a creer que somos merecedores de todo aquello que soñamos. 

Yo me en-si-mimo delante del fuego. 

A mi, desde pequeña, el fuego me ha dado paz ( no se si por ser Sagitario, signo de fuego). Recuerdo todavía aquella época en que tuve una depresión y pasaba los fines de semana con mis padres en Mallorca. El fuego me calmaba. me gustaba mirar a mi madre, que era una experta en iniciar y mantener el fuego. Tengo la imagen grabada de ella con un guante enorme  recolocando los troncos para avivar la llama. Me parecía super-woman, enfrentándose al fuego.

Aún hoy cuando le digo a la gente que si aquí usan guante para el fuego, me miran raro. ¿Pa qué? si existen todos esos instrumentos que a mi modo de ver, menos la escobilla , son decorativos. 

¿Lo habré soñado? seguramente mi hermana me sacará de dudas.

La cuestión es que este invierno quiero avivar el fuego con un guante que me proteja de quemarme y a la vez me permita recomponer los troncos para que se unan de nuevo según los cambios que la madera, consumida por las llamas, haya provocado, inevitablemente, en ellos. 

En el amor, quisiera hacer lo mismo.

Un amor que me inspire y facilite el espacio-tiempo para en-si-mimarme delante un fuego, un cielo o un mercadillo ( ¿Por qué no?)